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junio 7, 2021Los alimentos industrializados pierden sus propiedades de vitaminas, proteínas y minerales, pero además necesitan añadírseles ciertas sustancias químicas para “mejorar” sus procesos. Aquí la palabra “mejoría» significa interés económico. Los alimentos industrializados mejoran las utilidades de los fabricantes, mejoran rendimientos, abaten costos, alargan vida de anaquel, pero lo que no hacen es mejorar la calidad de los productos. Se “mejora” el color de los alimentos con colorantes artificiales, se “mejora” el sabor de los alimentos con saborizantes artificiales. Sin embargo, la organización mundial de la salud (OMS) ha confirmado que los aditivos, por su acción física o por su reacción bioquímica, se alteran dentro del organismo y transforman los sistemas metabólicos dando lugar a la aparición de materiales cancerígenos y mutagénicos.
Actualmente, el 96% de los alimentos infantiles contiene aditivos (saborizantes, preservativos, colorantes, antioxidantes). Toda la industria alimenticia se concentra en la producción de apariencias, desde los empaques, los colores, las letras, los mensajes, es decir, la mercadotecnia, hasta la elaboración misma de los productos, son apariencia. Para comprenderlo con un ejemplo sencillo, podemos ver los cereales secos, hojuelas de maíz, de arroz, etc. Estos alimentos tienen mucha azúcar, mucho sabor, mucho color, personajes atractivos, coloridos y entrañables pero no tienen germen. Y el germen del cereal es lo único que alimenta. Lo que queda en el cereal quitando el germen es únicamente almidón y harina.Éste es un ejemplo, pero los aditivos se encuentran en: refrescos, gelatinas, pastelitos, salsas, paletas, helados, margarinas, vinos, salchichas, carnes frías, dulces, quesos, pastas, mermeladas, pays, jugos, caldos de pollo, pan de caja y galletas. Vamos a echarle un ojo a una lista de los principales aditivos químicos que se utilizan en la industria:
Ácido Benzóico
Cinamalheido
Hidroxynisol Butilato
Acetato de sodio
Sulfato de aluminio – Amonio
Nitrato de sodio
Ascorbato de sodio
Carbonato de magnesio
Fosfato de calcio
Ascorbato
Gomas
Benzoato de sodio
Diacetil
Vitaminas sintéticas
Colorante amarillo
Fosfato de sodiodibásico
Peróxido hidrogenado
Goma de avena
Diacetato de sodio / Nitrato de sodio
Monoglycerina
Bromato de potasio
Fosfato de aluminio
Fosfato monobásico de calcio
Cloromine T/ Clorhidrato de sodio
Sulfato de aluminio potásico
Ácido butírico
Clorido de aluminio
Chloramine T
Metilcelulosa
Tartrato de potasio sódico
Colorantes 2, 3 y 5
Mono y diglicéridos
Óxido de calcio / Ácido sórbico
Sorbitán monolaurato
Petrolatum
Propionato de calcio
Citrato de calcio
Citrato de sodio
Acido piroligneo
Anato
Hipoclorito de sodio
Cochineal
Peróxido de hidrógeno
Bisulfito de potasio
Dextrina
Ácido hidroclórico
Sulfato de calcio
Sulfato de magnesio
Polymixin B
entre otros..
Ante la imposibilidad de determinar en cada etiqueta y en cada organismo la intoxicación que conlleva un alimento en particular, hay que desechar o bajar al máximo el consumo de alimentos procesados y acercarnos a los alimentos naturales. Es importante consumir productos frescos y orgánicos.
Una vez que el paladar se acostumbra a la ingesta de alimentos sanos y nutritivos, el rechazo a la industria alimenticia corre por cuenta del gusto: los alimentos industriales simplemente no se antojan.
Sin embargo, para acostumbrar al organismo a los sabores de la naturaleza es indispensable pasar un tiempo (varios meses o años) de restricción consciente y tajante en el consumo de aditivos alimentarios: cero industria alimenticia; dieta 100%, o lo más cerca del 100%, orgánica..
Este artículo es un enemigo de los laboratorios farmacéuticos que “curan” lo que la industria alimenticia enferma. Es un pequeño grano de arena en la búsqueda de un equilibrio distinto que nos permita vivir en salud sin pelear con armas farmacológicas cada vez más fuertes frente a enfermedades cada vez más poderosas, es un granito de arena en el camino de la salud.